Ingredientes
2 cazos de servir de vino blanco.
2 cazos (no muy llenos) de aceite de oliva
Medio kilo de harina
Una copita de anís dulce
Cáscara de limón
Anís en grano o matalauva
Azúcar y canela para rebozar
Preparación
En una sartén calentamos los dos cazos de aceite con la cáscara de limón, cuando coja sabor, apartamos y reservamos. Cuando temple, lo colamos.
En una fuente honda colocamos la harina en forma de volcán, añadimos el anís en grano. Vamos echando poco a poco el aceite caliente y a la vez vamos amasando hasta acabar con el aceite. Añadimos los dos cazos de vino blanco y continuamos amasando.
Se amasa todo muy bien, hasta conseguir una masa homogénea y le añadimos la copita de anís dulce y la pizquita de sal. Volvemos a amasar y cuando esté todo bien ligado, dejamos reposar la masa tapada durante más o menos una hora.
Transcurrido este tiempo, volvemos a amasar otra vez. Cortamos la masa en pedacitos y la extendemos con el rodillo de cocina. Pegamos los dos extremos dando forma de cilindro.
En una sartén o en una freidora iremos friendo los pestiños. Cuando estén doraditos los sacamos y en caliente los rebozamos en una mezcla de azúcar y canela molida.
Notas: En muchos sitios de Andalucía los rebozan en miel.
En una sartén o en una freidora iremos friendo los pestiños. Cuando estén doraditos los sacamos y en caliente los rebozamos en una mezcla de azúcar y canela molida.
Notas: En muchos sitios de Andalucía los rebozan en miel.