Si me descuido un poco se pasa la temporada de los membrillos y no subo esta receta. La verdad que preparé este dulce de membrillo en diciembre pero me había despistado subirla al blog. Particularmente me encanta el dulce de membrillo y el de guayaba. Yo conocí el segundo cuando vine a vivir a Canarias, la verdad no sé cual me gusta más de los dos. Esta es una de las típicas recetas que teniendo esta maquinita en casa te ahorra mucho tiempo y engorro de estar moviendo la preparación en el fuego.
Ingredientes (Para 1000 gr)
500 gr de membrillos lavados, sin pelar y sin pepitas
1 limón pelado y sin pepitas
500 gr de azúcar
Método Thermomix
Antes de nada limpiar muy bien los membrillos. Podemos utilizar un cepillo bajo el chorro de agua, hasta quitar la pelusa que los recubre. Los secamos con un paño.
Poner todos los ingredientes en el vaso y programar 30 segundos, velocidad progresiva 5-10. Con la espátula, bajar los restos de fruta de la tapa y del interior del vaso hacia las cuchillas.
Programar 30 minutos, 100º, velocidad 5. Cuando falten 10 minutos para terminar el tiempo programado, retirar el cubilete para que evapore y se caramelice. Colocar el cestillo apoyado en sus 4 patitas sobre la tapa para evitar salpicaduras.
Vierta la mezcla en un recipiente o en varios y dejar enfriar en un lugar seco.
Método Tradicional
Antes de nada limpiar muy bien los membrillos. Podemos utilizar un cepillo bajo el chorro de agua, hasta quitar la pelusa que los recubre. Los secamos con un paño.
Se ponen a cocer los membrillos en una olla grande y profunda, para que no salpiquen mientras se van haciendo, cubiertos de agua y con el zumo de un limón, durante unos 30-40 minutos.
Cuando se han enfriado un poco, se pelan y se les quita el corazón. Se va sacando la carne del membrillo.
Otra opción es poner a cocer los membrillos ya troceados con la piel, únicamente quitar el corazón. Cocerlos cubiertos de agua y el zumo de un limón. Dejar que se ablanden a fuego lento, removiendo con una cuchara de madera hasta que estén hecho un puré. Va cambiado de color y va espesando poco a poco.
Se pesa el membrillo ya cocido y se añade la misma cantidad de azúcar. Se tritura todo junto y se vuelve a poner al fuego. Ya sólo se necesita un poco de paciencia porque hay que mover con una cuchara de palo durante una media hora a fuego medio, hasta que tenga la consistencia adecuada. Estará listo cuando la cuchara de madera se mantenga de pie.
Se pone en moldes o copas y se deja enfriar
Navegando en internet he encontrado una receta que realiza el dulce de membrillo en la olla a presión. Lo he encontrado en el El aderezo. Lo he copiado idénticamente.
Método Olla PresiónEn una olla a presión echamos primero el zumo de limón, y encima la fruta y el azúcar.
Lo ponemos a fuego muy suave (mínimo), cuando todo el azúcar se haya disuelto y adquiera una forma de almíbar clarito.
A continuación, tapamos la olla con su tapadera de presión y cocemos 5 minutos. Con la válvula de seguridad que suba hasta el máximo.
Retiramos y cuando la olla se pueda abrir, miramos, si tiene mucho líquido, lo ponemos a cocer de nuevo, pero esta vez a fuego fuerte, destapada y removiendo para eliminar este exceso de agua.
En esta operación hay que tener cuidado (cúbrete las manos con guantes y protégete bien los brazos), ya que salta mucho y la mezcla de fruta y membrillo parece plástico deshecho, quema muchísimo.
Cuando haya reducido, metemos la batidora y trituramos la mezcla hasta obtener una pasta suave y homogénea.
Lo metemos en un molde de plástico alargado y lo dejamos enfriar para que cuaje.
Nota: El membrillo se conserva en perfectas condiciones unos cuantos meses sin resecarse ni endurecerse, eso sí, guardado en la nevera o en un sitio muy fresco.
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